lunes, 13 de octubre de 2008

¿Piedra papel o tijera?

En la vida he tenido la oportunidad de relacionarme con mujeres muy bellas; cada una, discutiblemente, más bella que la anterior, como la naturaleza superándose a sí misma. No son tantas como el plural sugiere -tampoco es mi ego hablando- pero sí las suficientes para percibir ciertas cosas. (En realidad, para decir lo que quiero decir, una sola habría bastado).

No sé si la vida sea una recompensa, una apuesta o una condena.

Entre más me acercaba al corazón de estos seres me era más fácil distinguir a la diosa de la mujer, a lo eterno de lo mortal, a la piedra de la carne. Comprendí que su resplandor, al igual que el resplandor que emana del sol, oculta tras sí bastas turbulencias invisibles a los ojos de los hombres; explosiones de fuego retorcido, de sueños destrozados, de mil plegarias, mil lágrimas y mil gritos silenciosos: Su belleza -¿su recompensa, su condena?- era perversamente proporcional a su sufrimiento y tristeza interior.

Y camino por la calle y veo un árbol con sus hojas y sus ramas brotando matemáticamente del tronco, veo un ave extender sus alas perfectamente simétricas mientras sobrevuela la ciudad, veo flores, veo abejas, escucho una canción muy bella escrita por un artista suicida; en suma, veo tanta belleza y gracia a mi alrededor que no puedo evitar preguntarme qué inenarrable tragedia se esconderá detrás de la creación del Universo.

sábado, 20 de septiembre de 2008

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Escribir es algo que, si no se es manco, debe hacerse con las dos manos.

martes, 1 de abril de 2008

Mis Amigos Imaginarios

Mis amigos imaginarios jamás aparecieron durante mi infancia, que es cuando tienen lugar todos los desórdenes que nos convierten en lo que somos (orfandades, abusos, exposiciones irresponsables ante ciertas entidades humanas o mecánicas, o simplemente nada, que es una de las peores variantes). A mis amigos imaginarios les dio por aparecerse mucho tiempo después, justamente cuando comencé a escribir este blog: personas desconocidas que ingresaban a este lugar y que leian los textos y que en ocasiones dejaban rastros de su presencia traducidos en comentarios. (Creo que entiendo por qué no se aparecieron antes). Con cada pseudónimo y comentario fueron construyéndose y revelándose a sí mismos, y mientras eso sucedía yo los imaginaba como seres localizados en tierras lejanas, ciertamente sensibles, indudablemente extravagantes.

La física cuántica es un terreno del conocimiento que para una considerableyposiblementepocodemocrática cantidad de homo-sapiens está más allá de su imaginación. La imaginación, por su parte, es un motor que acelerado a fondo alcanza la velocidad de la luz y cuando esto sucede, es posible, literalmente, ver el futuro, pero es una visión tan corta y borrosa que es necesario esperar hasta que se aclare como la realidad a través de un lente fotográfico. Muhammad-Ali tuvo una visión y años después su lente se aclaró: fue campeón del mundo. Yo imaginé, aceleré a fondo y vi el futuro. El destino se reveló como un número mágico que yo habia intuido después de observar una ecuación larga y borrosa.

Un saludo, profesor.

sábado, 2 de febrero de 2008

martes, 22 de enero de 2008

Madmoiselle

El aire en mis pulmones,
la luz en mis ojos,
la sonrisa en mi rostro:
todas ellas las pruebas irrefutables de tu existencia.

01.11.12

Tus labios fríos sobre mi frente: la boca de un revólver en mi cabeza.
Arriba las manos, deme todo lo que tiene.
Ya lo tienes. No tenias que disparar.
Tal vez, yo ya estaba muerto.